SIEMPRE Y CUANDO nazca el perdón tras una ofensa, se apacigüen los ánimos, se calmen las dudas, se dialogue en vez de pelear habrá esperanzas para la humanidad...
CADA VEZ QUE extendamos las manos pata levantar al caído, y disfrutemos cada nuevo día, absorbamos su belleza y mantengamos nuestros sentidos alerta, estaremos trabajando por nuevas esperanzas para la humanidad.
SIEMPRE que valoremos a las personas por lo que llevan en su interior sin importarnos sus bienes materiales, destacando y reconociendo sus virtudes, habrá esperanzas de un mundo mejor.
CADA VEZ que nos emocione el beso de un niño, que las miradas transmitan amor, alegría y optimismo, que seamos capaces de forjar sueños hermosos y concretarlos para bien general, no sólo habrá esperanzas sino que estaremos construyendo un mundo mejor.
MIENTRAS exista un hombro donde apoyarnos para llorar nuestras penas y sentirnos consolados, mientras estemos dispuestos a ser ese hombro para otras personas, no cabe duda de que habrá un mañana mejor para todos.
Con todo mi cariño, se lo comparto!
Rdvo. P. Santiago
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